De cantina en cantina

El hombre entro a la cantina, era un lugar nuevo, lo abrieron en el 2008, pero fue un año después que se animo a entrar.

Entonces había pocos asistentes a ese lugar, era poco conocido, entonces no muchos asistían aquí, no había con quien charlar.

Se fue entonces a un lugar de mucho parloteo, era en otro barrio, allí se hablaba de todo, todos hablaban con todos, nadie volteaba a verte de arriba a bajo para saber quien hablaba, solo platicaban y blasfemaban y charlaban, en fin, parloteaban.

Después el hombre regreso a esta cantina, entonces encontró ya a mas conocidos, hasta personas de su familia asistieron, es mas, motivo a algunos familiares a asistir a esta cantina, "si no estas aquí, no figuras en la nueva sociedad" dijo con voz experta. Entonces el hombre se quedo, pidió mesa, es mas unió otras mesas para que cupieran sus nuevos conocidos. Brindaron, cantaron, leyeron poesía, intercambiaron frases motivacionales, se dieron abrazos, compartieron fotos y hasta una "Selfie" se tomaron.

El hombre paso de ser un bufón a ser un guru, despotrico contra el sistema, emulo a pensadores revolucionarios, fue un niño perdido, un adolescente perdido, se sintió el mesías, compartió el vino y el pan, entonces se dio cuenta que se dio cuenta y todo valió madres...Salio de la cantina, la miro desde fuera, se asomo un poco, vio que todos los allí adentro hablaban queriendo ser escuchados y ser los únicos escuchados, se sintió triste y se fue a la cantina del otro barrio, allí donde nadie te conoce, donde puedes levantar la voz y gritar sin que nadie te mire mal,de hecho nadie te mira.

Camino por el parque, se metió al salón de baile, y bailo hasta gastar las suelas de sus mocasines bostonianos de pachuco bailarín, se detuvo un momento, justo al amanecer cuando la orquesta dejo de tocar, se dirigió a la puerta del salón de baile, se detuvo en el dintel, miro con nostalgia la cantina de enfrente, la luz diurna dejo ver una pequeña lagrima que quería salir, quizá sintió frió esa lagrima porque se volvió a los lagrimales.

Con paso era decidido iba entonando una canción de arrabal que  ponía música a su andar, casi bailando cruzo la avenida, ni siquiera se detuvo a mirar a ambos lados de la calle pudo haber sido atropellado, pero parecía un ser mágico que nada podía destruirlo, no titubeo al abrir la puerta de esa cantina donde todo es felicidad porque los asistentes allí buscan una felicidad perdida, que quizá nunca tuvieron...entonces nunca la han perdido.

En voz baja le dijo al tímido que estaba en la entrada: 
- Este año sera el año de Frida Kahlo
- Por que? Pregunto el timorato
- Porque pinta de la chingada

El hombre se dio la vuelta, salio del lugar y por la calle se fue entonando una canción mientas se perdía en la luz diurna del nuevo amanecer.



Escribir para vivir